Crítica: Sinister de Scott Derrickson

Scott Derrickson, el director de la terrorífica El exorcismo de Emily Rose, nos trae Sinister, su nueva incursión en el cine de terror tras la insípida Ultimátum a la Tierra.

Sinister cuenta la historia de un escritor de capa caída que acaba de mudarse, junto a su familia, a una nueva casa para escribir su próxima novela. Con este planteamiento visto mil veces empieza la película (tras una introducción de lo más escalofriante). Y no tiene muchas sorpresas, a pesar de intentarlo. Pero se queda en eso, en un intento, como al intentar dar profundidad a unos personajes demasiado predefinidos: la esposa incrédula, los hijos problemáticos y el padre obstinado. Hay que admitir que los momentos de tensión cumplen su cometido, con una historia de fantasmas un poco más elaborada que a lo que nos tienen acostumbrados últimamente.

Una de las mejores cosas de la película es, sin duda, la fotografía. A pesar de ser muy corriente, tiene momentos decentes, como cuando el escritor va alumbrando con el móvil, o los momentos en los que éste usa el proyector.

La dirección es la típica en estos casos: movimientos de cámara suaves en los momentos tranquilos y cámara epiléptica en los momentos de tensión. Lo mejor son las cintas de Super 8, sin duda. Y las actuaciones… son suficientes. Los únicos destacables son los hijos, que tienen algunos momentos que consiguen asustar bastante. Ethan Hawke no está del todo mal, aunque se limita a poner las mismas expresiones todo el rato. Y la mujer… no aporta nada quitando unos cuantos reproches a su obsesivo marido.

En conclusión: Sinister es una película que puede gustar bastante a los fans del género, pero si no te gusta el cine de terror… mejor apagar el proyector.

Sinister se estrena mañana 31 de octubre.

Crítica: Argo de Ben Affleck

Argo supone la tercera película como director de Ben Affleck, y no se conforma con contar la historia sino también protagonizarla, demostrando que es mucho mejor director que actor. El germen de la historia es un documento desclasificado que cuenta cómo varios diplomáticos estadounidenses fueron rescatados de Teherán a primeros de los 80 cuando tras el asalto a la embajada estuvieron varios meses ocultos en la embajada canadiense. Sin ser una película de corte político ni que tome excesivo partido por unos u otros en el conflicto, cuenta con un prólogo en donde hace un rápido resumen de lo que ha supuesto la historia más reciente de Irán, los distintos gobernantes que han tenido, cómo hubo un golpe de estado apoyado en la sombra por Estados Unidos y cómo el pueblo iraní sufrió penurias y hambre y acabó convirtiéndose mediante una revolución en una república islámica. Gracias a el podemos entender un poco mejor la situación actual y cómo se ha podido producir. Tampoco el director es muy crítico con su país y minimiza de alguna forma las responsabilidades que han tenido aunque no la oculta tampoco y muestra como en la CIA hay una polifonía en donde se nos muestra que no todos piensan igual.

Por otro lado, Argo habla del cine pues la forma elegida como menos mala para hacer el rescate es simular que son un equipo canadiense que busca localizaciones para su nueva película y es la parte que aporta ciertos toques de humor y ligereza a la historia. Ben Affleck nos muestra un Hollywood frívolo, de la apariencia y que no se toma en serio nada, empezando por ellos mismos. Affleck consigue juntar la seriedad y la profundidad del rescate con la ligereza de la forma de hacerlo con una gran maestría, manteniendo en todo momento la tensión que el relato necesita.

Argo cuenta con un gran reparto de actores de cine y televisión que aunque a veces no los podamos conocer por su nombre es difícil no reconocerles, como Bryan Cranston, el padre de la serie Malcom y ahora el protagonista de Breaking Bad, Alan Arkin (el abuelo de Pequeña Miss Sunshine), John Goodman, Kyle Chandler, protagonista de la serie Edición anterior y al que también vimos en Super 8 como el padre del protagonista.

En definitiva, Argo es una gran película que no hay que perderse.

Ficha en sensacine

Argo se estrena hoy viernes

Crítica: Looper de Rian Johnson

La encargada de cerrar la 45º edición del festival de Sitges,escrita y dirigida por Rian Johnson, llega a los cines para aportar novedades al tema de los viajes en el tiempo.

Ambientada en un futuro no muy lejano, la película empieza narrando qué son los "loopers", cuál es su trabajo y qué pasa cuando deciden cerrar su loop. Joseph Gordon-Levitt -en un papel que, aunque no es alo que nos tiene acostumbrados, borda- con un maquillaje un tanto extraño es elque pone la voz en off a esta introducción y se encarga de marcar las reglas del juego. ¡Y vaya juego! De principio a fin consigue mantener nuestra atención, y si nos descuidamos hasta hace que nos olvidemos de pestañear.

En este western moderno -sí, western: nombres, armas vestuario… hay muchas referencias a este tipo de cine- nos encontramos co nactores tremendos como Jeff Daniels, a un Paul Danno irreconocible (y con una de las secuencias más impactantes del film), Emily Blunt o Noah Segan. Pero claro,los protagonistas lo son por algo: el duelo entre Bruce Willis y JosephGordon-Levitt es genial: empieza con fuerza para ir creciendo a lo largo de la película. La caracterización está muy conseguida, haciendo que ambos se parezcan muchísimo. Pero esto tiene algo malo: Joseph Gordon-Levitt -Joe en la película- está raro, y esto pesa bastante ya que hace que estemos más atentos de su maquillaje que de su actuación en algunos momentos. También hay que destacar al pequeño Pierce Gagnon, que interpreta estupendamente a Cid.

A medida que avanza la película nos vamos encontrando con más efectos especiales. Por suerte estos se han usado cuando es imprescindible y no saturan: motos voladoras y telequinesia al principio para ir aumentando en espectacularidad, hasta llegar a un final donde los efectos a nivel visual son una delicia sin excesos. A nivel técnico una de las mejores cosas de la película es la fotografía nocturna, en especial la del apartamento de Joe, haciendo que la penumbra no parezca forzada. La acción está rodada con bastante acierto, con movimientos de cámara elegantes y precisos.

El guión tiene bastantes perlas: la ya comentada secuenciade Paul Dano, que es espectacular, o la conversación de la cafetería. Peroclaro, lo que sorprende es la base: asesinos a sueldo que matan a gente delfuturo. Da mucho, muchísimo juego, y Rian Johnson lo aprovecha al máximo. Una suerte, porque últimamente hay buenas ideas que se desaprovechan bastante.

En definitiva, una película que no podéis perderos, ya que aporta frescura tanto al tema de los viajes en el tiempo como al western. 

Ficha en Sensacine

Looper se estrena en cines el 19 de octubre.